domingo, 4 de marzo de 2012


No se preocupe, no voy a robarle mucho tiempo, solo pasaba para aclarar unas cuantas cosas y asi de paso me despido medio encondiciones. Lo primero de todo, he dejado la casa más limpia de lo que realmente la encontré cuando coincidimos por primera vez y yo, tan ingenua y repleta de ilusiones le dije tan rápidamente que si, que me quedaba, pero eso es lo de menos, supongo que al fin y al cabo lo único que prentedía con tanta limpieza maniatica era esconder todo el dolor que hemos pasado, para que un futuro inquilino no tenga que pasar por lo mismo. Los geranios de la ventana ya no están, los tiré en un ataque de ira y desolación y ahora no son más que añicos destrozados que se asemejan a mi alma. Las sábanas las he cambiado y esque por cada pelea que teníamos le seguía una reconciliación en toda regla con sexo de ese que tanto nos gustaba pero en el que tan poco sentimiento quedaba ya. Respecto a los cuadros que colgaban de la pared...bueno, a decir verdad, están casi en el mismo estado que los geranios (y mi alma, no se olvide), asi que con todos mis respetos he comprado otros más alegres y de colores vivos y que por suerte, no han conocido todo lo que hemos vivido. Los libros los quemé, me vinieron bien a la hora de entrar en calor puesto que sus manos, esas que yo tanto había acariciado, con el tiempo dejaron de servir de abrigo y se dedicaron a todo tipo de hobbys con la intención de no prestarme la más mínima atención. La radio seguramente no funcione, hace ya mucho que dejamos de usarla puesto que todas las canciones hablaban siempre del mismo desamor...y con esto y mis más sinceras disculpas me despidor. Yo por mi parte cojo el tren que sale esta misma noche, me cambio de casa, de barrio y de ciudad, una lástima que no pueda cambiar de amor tan fácilmente, una lástima que haya aprendido a querer y no a olvidar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nosotros.

Nosotros.
Para Siempre(: